La ciclotimia climática, a la altura de la tarde, ya había combinado la aparición del sol, nubes, lloviznas y otra vez los rayos, aunque entre cambio y cambio el calor tuvo un respiro. El murmullo se transformó en ruido cuando aterrizó River, el primero de los dos equipos en llegar en un vuelo chárter. Cerca de 600 personas lo esperaron en el aeropuerto y lo escoltaron en caravana hasta el hotel Atrium, ubicado sobre la avenida Hernandarias, donde había otros 500 simpatizantes enfervorizados. River prefirió la exclusividad antes que el lujo, por lo que el hotel fue cerrado y sólo es utilizado por el plantel dirigido por Matías Almeyda.

Los hinchas ejercieron presión y hasta se rompieron un par de macetas del lugar por los empujones. El fenómeno sigue intacto, tal cual cómo sucede cada vez que visita el interior. Algo similar sucedió con Boca, que arribó bien tarde, pasadas las 22, al hotel Amerian Casino Gala.

Así como alguna vez fue la selección de fútbol, así como también los Pumas se hicieron presentes en esta ciudad, el gobernador Jorge Capitanich se dio el gusto de organizar un superclásico. "Estamos contentos con tener un partido así en nuestra provincia, pero acá estamos más pendientes de que no haya incidentes que sea una fiesta", se sincera Alberto, un taxista que se gana la vida a bordo de su Fiat Siena.

La ciudad tiene movimientos inusuales. Juan Carlos, vendedor de camisetas y gorros, vino especialmente de Córdoba para sumarse al negocio del superclásico: en una plaza entre las calles Hernandarias y Alvear, lo que más vendió fueron las camisetas xeneizes con el nombre de Román en la espalda, sobre todo para los más chicos y, de River, con el nombre de Ortega. Las remeras salían entre $ 50 y 70 pesos; las banderas, $ 30.

El operativo de seguridad comenzará desde temprano y estarán abocados 2500 policías. Los hinchas de Boca llegarán por la ruta 11, mientras que los de River viajarán por la 14. Los simpatizantes xeneizes pararán en el Camping de la Mutual del Círculo de Oficiales de la Policía de Chaco, ubicado sobre la ruta nacional 16, cerca del Puerto Tirol. Los millonarios harán base en el Parque Caraguatá, en las afueras de Resistencia. La Policía espera entre 800 y 1000 barras de Boca y entre 700 y 800 de River.

Habrá un triple cacheo: se identificará el color para cada entrada, se utilizará un escáner por si hay presencia de objetos contundentes y un sistema para el control de alcoholemia, y el último chequeo tendrá que ver con la validez del ticket con la lectura de barras, para evitar las falsificaciones. Algunos barras de Boca llegaron ayer; otros lo harán hoy. Los de River tienen previsto desembarcar al mediodía. Está claro, sobre ellos habrá una lupa mayor en cuanto al comportamiento que ofrezcan en esta ciudad.
También contra el dengue

Además de las precauciones para evitar incidentes, por el superclásico el Departamento de Salud de Chaco dispuso de barreras sanitarias en seis accesos, como continuidad en las acciones de prevención en el marco de la lucha contra el dengue.

Fuente: La Nación