Colonia Elisa: incendiaron la casa del presunto femicida de Adriana Barreto
Ocurrió en la noche del martes. Amigos y familiares de la mujer que murió de un disparo en el pecho el lunes, hecho que por ahora se investiga como un presunto suicidio, desataron su ira contra el comercio de la familia de Carlos Ojeda, pareja de Adriana, a quien sindican como el asesino de la joven.
Adriana Barreto, de 26 años de edad, apareció muerta el lunes en Colonia Elisa. Tenía un balazo en el pecho. El arma de donde salió el disparo pertenece a su pareja, el policía Carlos Ojeda. Si bien la versión que maneja la Policía del Chaco y la fiscalía es de un supuesto suicidio, lo cierto es que la familia de la víctima descree de la historia oficial: creen que Ojeda la mató.
En este marco, amigos y familiares de Barreto marcharon desde el acceso a La Verde (localidad de donde era oriunda la víctima) hasta la casa del presunto femicida. Una vez allí, minutos antes de las 22, arrojaron piedras y botellas contra la casa de Ojeda, para luego prenderla fuego.
Cabe aclarar que, en su parte frontal, la vivienda funciona como un local comercial de venta de indumentarias.
El fuego produjo la destrucción total del local, observando restos de ropas y calzados, un aire acondicionado Split y otros elementos. Por el hecho no se registró personas lesionadas, indicaron desde la Policía. Ojeda no se encontraba en el lugar.
“Mi hija no se mató, a mi hija la mataron y yo quiero que se haga justicia”, exigió Adelaida Montenegro, en declaraciones a CIUDAD TV. Y advirtió que “desde el vamos están haciendo todas las cosas mal, hay muchas contradicciones en todo lo que hizo la policía”. “Quiero que se haga justicia, que se investigue”, insistió la madre de Adriana Barreto.
Montenegro reveló que su hija convivía con su pareja desde hacía menos de un año aunque nunca contó que era víctima de algún tipo de violencia. No obstante, sostuvo que “nosotros sospechábamos y mis dos hijos siempre me decían fíjate los estados como que daban indicios. Una vez su hermano lo llamó para ir a buscarla, pero ella decía que no, que no le pasaba nada”.
“Hoy (martes) cuando la reviso ella presentaba signos de violencia en su manito, en su cara, como golpes. Porque ella es blanca y es imposible ocultar. El disparo fue en el pecho, ellos no llamaron a la Policía, no llamaron a la ambulancia, manipularon todo ellos. Cuando tengo entendido que cuando sucede un hecho así lo primero que hay que esperar es al perito”, indicó.